La construcción del nuevo centro de salud en Bell Ville presenta un avance cercano al 40%. Contará con equipamiento de última tecnología y una superficie de casi 9.000 metros cuadrados para mejorar la atención sanitaria en la zona.

La construcción del nuevo Hospital Regional de Bell Ville, impulsada por el Gobierno de Córdoba, avanza a paso firme y ya alcanza un 39% de ejecución. Este centro de salud está destinado a convertirse en un referente para la atención médica de la ciudad y toda la región gracias a su moderna infraestructura y la concentración de múltiples especialidades.

Actualmente, 160 personas trabajan en la construcción del edificio, y se prevé que este número se duplique en los próximos meses. La obra está a cargo de la Subsecretaría de Arquitectura, dependiente del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos.

Un centro de salud de alta complejidad

El nuevo nosocomio se distribuirá en una superficie cubierta de 8.982 metros cuadrados sobre un terreno de 31.450 m². Su diseño permitirá centralizar especialidades que hoy funcionan en construcciones aisladas, optimizando los recursos y la calidad del servicio.

El proyecto contempla áreas de internación, unidades de cuidados intensivos (UCI y UTI) y neonatología. También contará con atención ambulatoria programada, guardias de emergencias para adultos y pediátricas, diagnóstico por imágenes y servicios de tratamiento especializado.

Entre sus instalaciones se incluirán laboratorios, servicio de hemoterapia, un centro quirúrgico con cuatro quirófanos, área de endoscopía, un centro obstétrico con tres unidades de trabajo de parto y recuperación (UTPR), anatomía patológica, farmacia y central de esterilización.

Sostenibilidad y estrategia sanitaria regional

Un aspecto destacado del proyecto es su enfoque en la sostenibilidad. El hospital contará con una instalación fotovoltaica que le permitirá cubrir aproximadamente el 20% de su consumo energético con energía renovable, reduciendo así su impacto ambiental.

Esta iniciativa forma parte de una estrategia sanitaria regional que busca mejorar la capacidad de atención en servicios clave como pediatría, obstetricia, neonatología, traumatología, cirugía general y cuidados intensivos para adultos, acercando servicios de diagnóstico, prevención y curación a todos los vecinos de la zona.