Los principales motivos por los que el consumidor argentino elige cada vez más la carne de pollo, según el estudio del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), pueden resumirse en varios ejes clave que reflejan tanto factores económicos como percepciones de calidad, salud y confianza.

Aquí están los puntos más destacados:

1. Percepción positiva y confianza

• El estudio confirma que la carne de pollo tiene una imagen altamente positiva entre los argentinos.

• El 69% de los consumidores prefiere comprar en pollerías, principalmente porque las asocian con confianza y calidad.

 2. Precio competitivo y accesibilidad

• El precio es un factor decisivo: el 26% de los encuestados destacó el costo accesible como una de las principales razones de elección.

• En un contexto económico desafiante, el pollo se consolida como una opción más económica frente a otras carnes, especialmente la vacuna.

3. Asociación con la salud

• La salud es el motivo más mencionado: el 53% asocia la carne de pollo con una alimentación saludable, baja en grasas y adecuado para distintas edades.

• Esto refuerza su posición como una proteína liviana y nutritiva, ideal para dietas equilibradas.

4. Versatilidad y practicidad

• Un 18% de los encuestados valoró sus aspectos culinarios, como su versatilidad y facilidad de preparación.

• Puede cocinarse de muchas formas y adaptarse a distintos tipos de comidas, lo que lo hace ideal para el consumo cotidiano.

5. Transparencia y trazabilidad

• El 87% manifestó interés en conocer el proceso productivo y la trazabilidad del pollo que consume.

• Esto refleja una tendencia creciente hacia la transparencia, la información clara y el consumo responsable.

6. Presencia cotidiana en la dieta

• Más de la mitad de los encuestados consume pollo entre una y tres veces por semana, lo que muestra su presencia estable y habitual en la alimentación argentina.

El consumidor argentino elige cada vez más la carne de pollo por su saludabilidad, precio accesible, versatilidad, confianza en el punto de venta y creciente interés por la transparencia en la producción.
Estos factores consolidan al pollo como una proteína protagonista en la mesa de los argentinos.