Empezó a ejercer la profesión a los 25 y la sigue eligiendo luego de 30 años. Decidió abocarse a esta especialidad cuando terminó la universidad y trabajó algunos años en una clínica donde vio el actuar de todas las medicinas. Anestesia era lo que más se adaptaba a su forma de vida.

Maggi amplió las ventajas de los cambios logrados en el último período: "Permitió que muchas operaciones se sumaran a las que normalmente se estaban realizando anteriormente. Hoy estamos trabajando con las tecnologías usadas en las grandes ciudades".

Por último, le dedicó unas palabras de agradecimiento a su trabajo: "Soy un agradecido a mi profesión, siempre me dio satisfacciones. En todo instante pude trabaja con la tranquilidad que quise. Hay momentos muy especiales, como cuando dos vidas están en nuestras manos como en una cirugía de cesárea. Ver que la madre sale con su hijo abrazado, sonriendo y festejando, es un acontecimiento muy importante".