Susana Daprati hace más de tres décadas que es maestra y hoy se cruza a sus ex alumnos que son padres y llevan a sus hijos. Destacó que el docente tiene que ser creativo, comprometido y profesional ya que el niño hoy tiene una demanda diferente. Los niños llevan propuestas y el docente debe adaptarse, ser cariñoso y contenedor. “Hoy las escuelas reflejan lo que pasa en la sociedad y los maestros debemos ayudar para que las sociedades sean más justas. La sociedad está atravesando todas las instituciones, a cada uno que le toque trabajar tiene que aportar su granito de arena para ser más justos para todos”, resaltó. Daprati expresó que ser docente es seguir perfeccionando día a día. En pocos meses planea jubilarse porque siente que ya cumplió una etapa. Su vida ha cambiado mucho gracias a su trabajo y el hecho de seguir perfeccionándose siempre, logra que pueda pararse en el aula de cierta manera.