Sociedad.

Marcos Juárez

Pedro Capponi :“La vida después del trasplante es posible y vale la pena"

En el Día Nacional de la Donación de Órganos, Pedro compartió su historia como trasplantado cardíaco. A 13 años de la operación que le cambió la vida, recuerda con emoción la espera, valora el acto de donar y transmite un mensaje de esperanza y responsabilidad

30-05-2025
  • Pedro Capponi

Cada 30 de mayo, Argentina conmemora el Día Nacional de la Donación de Órganos, una jornada que invita a pensar en la vida, en la generosidad y en todas las historias que renacen gracias a una decisión solidaria. Pedro Capponi, vecino de Marcos Juárez, es protagonista de una de esas historias. En 2011 recibió un trasplante de corazón que le permitió seguir viviendo. Hoy, a 13 años de aquel momento, su testimonio conmueve, educa y transmite esperanza.

“La vida después del trasplante es posible y vale la pena”, asegura Pedro, con una serenidad que solo da el haber atravesado una experiencia límite

Cuenta que convivió durante años con una miocardiopatía dilatada que fue debilitando su corazón y con él, su rutina y su calidad de vida. Lo que antes era cotidiano —caminar, subir una escalera, trabajar— se volvió imposible.

Ingresó en lista de espera en septiembre de 2009. Y desde entonces, cada llamado era una posibilidad. Hasta que finalmente, en febrero de 2011, llegó el órgano compatible.

“Esos 17 meses que estuve esperando un corazón, no se los deseo a nadie” recuerda

Durante ese tiempo, Pedro participó de varios operativos frustrados. Cada uno de ellos implicaba preparar maletas, viajar de urgencia, hacerse estudios, y regresar a casa sin resultados.

La operación se realizó en el Hospital Italiano de Buenos Aires. La recuperación fue larga, con controles rigurosos, internaciones y cambios drásticos en su estilo de vida.

Pero Pedro nunca perdió la perspectiva: fue una segunda oportunidad, y eso conlleva un compromiso.

“Nosotros los trasplantados hemos sido premiados. Entonces tenemos que ser muy respetuosos de esa condición que nos tocó”, reflexiona.

Hoy vive con una salud estable, realiza actividades, camina con frecuencia y valora cada pequeño momento.

Consciente del valor que tiene su testimonio, Pedro no duda en hablar públicamente sobre la donación de órganos. Sabe que aún hay muchas personas esperando una oportunidad.

“Ese es el cuello de botella que tenemos. Que haya realmente órganos para realizar esos trasplantes”, afirma, y suma datos: actualmente hay más de 7.000 personas en lista de espera en Argentina.

También destaca el acompañamiento familiar, el apoyo de su esposa, hijos y amigos, y el rol fundamental del sistema de salud. Pero sobre todo, agradece a quien, en un momento de dolor, dijo “sí” a la donación. “Yo me olvidé de que estoy trasplantado”, dice Pedro, como una forma de celebrar la vida sin olvidar su origen.
 

Contactanos por cualquier consulta