El odontólogo Marcelo Angelaccio, contó a CADENA SUDESTE, que hace 30 años ejerce la profesión y es el momento más difícil que le ha tocado vivir. Si bien la atención de urgencias estuvo habilitada desde un primer momento, cada día van modificando los protocolos para brindar mejor atención al paciente. "La práctica odontológica en general y otras profesiones del mundo viven una crisis muy profunda". Marcelo señaló que desde el primer momento están siguiendo indicaciones de la OMS, la Confederación Odontológica Argentina, y el COE, que sacó su propio protocolo, para poder atender a un paciente en las urgencias. Por ende, debieron armar en el consultorio una zona donde se limpia sus pies, luego se lava las manos con alcohol en gel, se viste con cubre pies descartable y un camisolín también descartable. El profesional debe estar vestido como los médicos o enfermeros de un terapia intensiva, el ambo que no debe venir de la casa, debe cambiar calzado y protección en el calzado. El mono quirúrgico es de una tela impermeable y sobre eso el camisolín. Luego 2 pares de guantes y barbijos, anteojos protectores y la mampara protectora para evitar el contacto con la saliva del paciente. Angelaccio destacó que lleva unos 20 minutos prepararse. La atención puede llevar una media hora, luego la limpieza y descartar todo lo descartable. Hay que airear unos 45 minutos hasta el siguiente paciente y la esterilización del instrumental que eso se hizo siempre. El odontólogo manifestó que se incrementó el costo para el especialista, por todo el material descartable que se debe usar, nunca se hacía solo en algunas prácticas específicas. “Las casas de artículos de ventas de artículos dentales, no ayudaron para nada porque nosotros previendo que se venía todo esto, empezamos a comprar materiales. Desde los primeros días de marzo a abril, los costos de esos productos se multiplicaron por 3 o por 4. Lo digo a título personal porque no pertenezco a ninguna institución", dijo el profesional de salud. "En estos momentos debemos ayudarnos unos con otros, no buscar un rédito económico de la situación". Marcelo Angelaccio agregó que el Colegio Odontológico hizo una estructura de costos sobre lo cual al principio de la cuarentena como ninguna obra social, estaba asumiendo los costos del material, por ello había que cobrarle al paciente alrededor $1500 por el protocolo de bioseguirdad por Covid-19 . "A mí siempre me pareció mucho, sacamos un número de los que nos costaba a nosotros y lo trasladamos al paciente". Desde ayer APROSS y la mayoría de las obras sociales, empezaron a cubrir los kits. Aunque desde el consultorio, los empezaron a fabricar entre ellos. Una secretaria fabrica algunos de los elementos, luego se esterilizan en la clínica para no encarecer la consulta al paciente. Angelaccio informó que disminuyó la cantidad de pacientes por día a un 30%. "Estoy muy agradecido con la gente porque no dejaron de confiar en el profesional y ante cualquier problema recurre a nosotros, al menos durante 2 años no va a cambiar el problema". Concluyó: "Hay que tener precaución a la hora de atender a todos los pacientes, pero haciendo de cuenta de que todos están infectados para que nadie vaya a sentir que no se lo cuido como debe ser".