Guillermo Giménez, quien investigó el caso, comentó: “El martes entre las 6 y 10 am, un vecino que todas la mañanas sale a caminar y toma la avenida 21 que desemboca en un camino rural, cuando vuelve en un trayecto de 5 cuadras se empieza a morir un perro, luego un gato. Por la particularidad, empezó a sospechar de un vecino cuando había amenazado de muerte a sus perritos. En esa esquina donde fallecieron los animales, se reunieron varios que estaban afuera y estaban domesticados”. Agregó que las víctimas tienen una idea de quién podría ser quien asesina a sus mascotas. Uno de los perros que murió tenía convulsiones, pérdidas musculares y fue acompañado por otros perros que también sufrieron eso. Desde el miércoles fallecieron más de ocho animales y ayer hubo un último caso. Los vecinos han hecho dos denuncias en la comisaría local pero no tienen pruebas concretas de la persona acusada. En el trayecto de esta mañana hay dos personas que estuvieron descompuestas y están en el hospital, ya están a la espera del resultado de los análisis. Un veterinario pudo salvar a uno de los animales, quienes fueron envenenados con un pesticida fuerte y tuvieron que ingerirlo porque fue un ataque al sistema digestivo. Este veneno es un líquido usado en el campo. “Suena extraño que el gato también se haya intoxicado. Ayer me contacté con bromatología y por el momento no hubo ninguna recorrida y tampoco en los tanques de agua, en donde se sospecha que allí podría estar el veneno”. Los vecinos están preocupados por la situación de sus animales, por bronca a este vecino posible sospechoso y disconformes con las autoridades.